¿Qué hace que una mujer sea percibida como educada? ¿Será el dinero? ¿El círculo social? ¿El nivel de estudios? No, en realidad, todas las mujeres educadas, comparten 16 características fundamentales.
La educación es una de las cualidades más llamativas que puede tener una persona.
Nuestro entorno siempre diferenciará entre una persona con modales a otra que actúa de manera grosera e irrespetuosa.
La educación no tiene nada que ver con el dinero. No se necesita ser millonario para ser educado. De hecho, son bastantes las personas que tienen mucho dinero que no se comportan de la manera más correcta con quienes lo rodean.
Desde el hogar se debe cultivar la educación. Y es que precisamente son cualidades que deben practicarse desde la casa, y que no necesariamente se tienen que aprender en un salón de clases. Ser educado puede ser sinónimo de cortés, atento y respetuoso.
Hay personas mayores que dicen que los valores y la educación se han perdido con el paso del tiempo. Pese a que esto no es completamente cierto, si es verdad que hay determinados factores que han incidido en que los comportamientos hayan cambiado, y en algunos casos para mal.
Uno de ellos es, por ejemplo, la tecnología. La tecnología no es mala, en lo absoluto. Pero hay personas que se sumergen tanto en ella (por ejemplo, en una tableta o móvil) que no están pendientes de su entorno. A veces asienten, pero no escuchan lo que les dicen, o ignoran a otras personas que están en su entorno más cercano.
Ser una persona educada no es una tarea imposible, ni tampoco amerita tomar clases por varias horas. Son pequeños detalles, pero que pueden marcar una gran diferencia. Así que sigue leyendo este artículo para que sepas cómo ser una persona educada, y ser un ejemplo para los demás. No te arrepentirás.
Formas de ser una persona educada
A continuación, te presentamos una serie de tips para que sepas cómo se comporta una persona educada. Tal vez la mayoría los sabías y te parezcan obvias, pero que a veces pueden pasarse por alto. Síguelos y compártelos, y de este modo harás un aporte para tener una sociedad con más mujeres educadas.
#1. Saluda
Si llegas a una persona donde hay varias personas, saluda y sé cordial. Al menos con un “buenos días” o “buenas noches”. Llegar a un sitio y querer pasar desapercibido o evitar a los demás es una mala educación.
#2. Despídete
Cuando te marches de un sitio, como una reunión o una fiesta, dedica un tiempo para despedirte con las personas que estabas, especialmente de aquellas con las que conversaste o compartiste directamente. “Desaparecer” es una grosería.
#3. Pide permiso
Si vas caminando y te encuentras con personas en su camino, pide permiso. No optes simplemente por pasar bruscamente sin esperar a que se abran camino. Sí, es cierto que hay personas que no atienden a nuestros pedidos, pero no por ello debemos comportarnos de mala forma.
Saluda a todos al llegar 
Despídete amablemente al retirarte 
Pide permiso siempre al pasar
#4. Pide disculpas
Esto no quiere decir que debas disculparte por cada cosa que hagas en el día. Pero, por ejemplo, si tropiezas con alguien toma unos segundos para decir que lo lamentas de manera cordial. Si no lo haces, te verás cómo una persona mal educada.
#5. Sostén la puerta para los otros
Si observas que otra persona viene en tu misma dirección y hay solamente una puerta, esto quiere decir que también va a pasar. Es de mala educación pasar y lanzarle la puerta a otra persona en la cara. Aguanta la puerta y poco y espera que pase, seguramente te lo agradecerá.
Ojo, esto no va únicamente para los hombres. Las mujeres también pueden y deben hacerlo, así sea una persona del sexo opuesto la que viene detrás o delante, especialmente si es de la tercera edad.
#6. Exprésate adecuadamente
Todos decimos groserías en algún momento, es “normal”. Pero todo depende del contexto. Siempre trata la forma de expresarte utilizando palabras menos vulgares. Si eres de esas personas que lanzan groserías cada dos o tres palabras, seguramente eres muy mal vista.
Pide disculpas cuando te equivoques. 
Sostén la puerta para que pasen las personas mayores. 
Habla con propiedad y educación.
#7. Presta atención
Si alguien te está hablando, presta atención, así no seas la única persona en el lugar. Seguramente la persona está haciendo un esfuerzo para poder ver a todas las otras personas en su entorno. Si haces lo contrario, seguramente no querrá seguir comunicándose contigo.
#8. Dale la cara a todos
Cuando seas la persona que está hablando frente a un grupo de personas, trata de hacer contacto visual con cada una de ellas. Si por ejemplo tienes personas a tu izquierda y a tu derecha, y solo te dignas a ver a las del lado izquierdo, las otras personas se sentirán irrespetadas y descartadas.
#9. Sé agradecido
Cuando alguien hace algo por ti, así no se lo hayas solicitado, o cuando pidas un favor, siempre debes ser agradecido. Aprende a dar las gracias para hacerle saber a la otra persona que valoras la ayuda que te brindó. De lo contrario, quedarás como una persona mal agradecida, y seguramente no querrá hacer más nada por ti.
#10. Di por favor
A menos que se trate de una orden (y también dependiendo del contexto), cuando pidas a otra persona que haga algo, así no sea directamente para ti, nada te cuesta decir por favor. Recuerda que la otra persona sacrificará un poco de tiempo, y seguramente también esfuerzo, para ayudarte.
#11. Responde
Aunque suene bastante obvio, lo cierto es que hay muchas personas que no le dan la debida importancia. Si alguien habla contigo, o te escribe, tómate un tiempo para responder. Ya sea un mensaje, un correo electrónico, un comentario, etc. Es alguien que está tratando de tener una conversación contigo, dale valor y sé agradecido. No tiene que ser de forma instantánea si estás muy ocupado, pero trata de hacerlo en algún momento.
#12. Da el ejemplo
Una de las mejores maneras de obtener respeto, es dándolo primero. Si eres una persona educada, seguramente los demás se darán cuenta y, en la mayoría de los casos, te tratarán de la misma forma. Da el ejemplo, dile al mundo que se puede ser una persona educada, aunque se tenga poco o mucho.
#13. No tomes decisiones por los demás
Una cosa es dar un consejo, y otra muy diferente tomar una decisión por otra persona. Por ejemplo, si estás en tu restaurante con alguien, y la otra persona está indecisa sobre qué ordenar y te pide una opinión o recomendación, no quiere decir que tengas que decirle al mesero lo que esa persona va a tomar sin haberle hecho un comentario anteriormente. Además de ser mal educado, harás pasar vergüenza a la otra persona.
#14. Saber escuchar, sin juzgar
Si una persona está contándote o confiándote un detalle importante, aprende a escuchar. Seguramente querrá desahogarse por alguna mala decisión o por algo que le haya pasado.
Dale apoyo y escucha mientras se desahoga, sin ponerte a juzgar o refutar cualquier cosa que te diga. Guárdate tu opinión a menos que te la pida. De lo contrario, es muy probable que esa persona más nunca vuelva a confiar en ti.
#15. No finjas en una conversación
Seguramente en algún momento te ha tocado sostener una conversación con otra persona en un lugar con mucho ruido, en donde te cuesta escuchar claramente lo que te dicen. Un grave error es asentir así no hayas entendido lo que te dicen.
Si la otra persona se da cuenta, pensará que no te importa nada de lo que te dice. Lo correcto es que, si no escuchas o no entiendes algo, pregúntale y no intentes fingir, ya que quedarás muy mal.
#16. Ni muy temprano, ni muy tarde
Si recibes una invitación, como a una fiesta de cumpleaños, trata de llegar a tiempo. Si llegas antes de la hora, seguramente encontrarás al anfitrión terminando de hacer los preparativos, y en lugar de ayudar, podrías estorbar. Tampoco llegues a última hora, pareciera que no les das importancia y que solo fuiste, por ejemplo, a comer torta.